Pase un cumpleaños mas en la oficina y como era de esperar paso de nuevo por caras largas y modos un poco difíciles de tomar en cuenta como celebración, así era esto desde un principio y nunca se compuso, así que con el corazón en la mano me fui a plantar a la oficina de mi jefa y a decirle que no lo soportaba mas, me tenia que ir ya.
Su reacción como siempre me sorprendió, porque siempre es mejor de como creo que sera, la historia es larga y no quiero hablar mucho de esto, solo quiero decir que hoy estoy en casa.
Estoy en casa, que es mi estudio y ahora si corriendo tras de los que espero sean mis clientes.
Ya vendrán mejores momentos, hay un olor en el aire que me lo dice.
