Saltan los recuerdos como un ejercito furioso, el tiempo devora a pedazos, sin piedad ni remordimiento, juego a tragarme la vida. Debo aceptar, no depender de otro, cuando nunca ha sido así, es tiempo de dejar la seguridad para aprender a caer.
Ahora corré el más viejo de los deseos, quemándose por dentro, detonando en pensamientos razonados...tendrá que hacerse responsable, se sienta un rato, toma aire y se suicida, no tenia que más pensar, tenía que trascender…..ser.
domingo, agosto 08, 2004
viernes, agosto 06, 2004
Convenciendo al gato
Pase el día de hoy convenciendo a mi gato de que no es imaginario para que deje de desaparecerse, por que odio buscarlo para acariciarlo y no encontrarlo, aparte de eso nada importante ha pasado, solo que he comido una enorme rebanada de pastel sabor capuchino sin mayor problema.
Etiquetas:
Vida
Suscribirse a:
Entradas (Atom)